La sostenibilidad y la conservación son factores imprescindibles en el mundo actual. En gestión forestal, donde tradicionalmente la industria se ha visto como un agente destructivo para el medio ambiente, son valores determinantes para el desarrollo socioeconómico.
España es el segundo país de la Unión Europea con más superficie forestal, un 55% de su territorio, solo por detrás de Suecia. Sin embargo, el peso de la industria forestal tiene un impacto modesto (0,63%) en el PIB estatal, una cifra que está más de medio punto por debajo de la media europea y muy por debajo de países con recursos forestales equivalentes.
En una época de constante transformación digital en la que la tecnología está revolucionando sectores e industrias de todo el mundo, el de la gestión forestal no iba a ser menos. Es por ello por lo que muchas empresas e instituciones forestales han comenzado a introducir y desarrollar nuevas innovaciones tecnológicas para mejorar los resultados de la gestión forestal.
¿Qué es la gestión forestal?
La gestión forestal hace referencia a cualquier intervención humana planificada en un ecosistema forestal para alcanzar unos objetivos concretos. Normalmente pueden dividirse en medioambientales, económicos y sociales.
Estos objetivos están interrelacionados y son interdependientes, y los gestores forestales suelen valorar uno o varios por igual. En algunos casos, estos objetivos pueden tener preferencia sobre otros.
Existen diferentes tipos de gestión forestal. A nivel genérico, se pueden distinguir cuatro grandes grupos: la gestión paisajística, si predomina un propósito cultural; la silvicultura, para el aprovechamiento del terreno; la gestión protectora, si se busca proteger el suelo, el agua y los ciclos naturales del bosque; y la dinámica libre, enfocada para que el bosque crezca, madure y evolucione con la mínima intervención humana posible.
En estos grupos en los que se divide la gestión forestal, la aplicación de la tecnología mejora la planificación, el monitoreo y la conservación, optimizando recursos y promoviendo prácticas sostenibles para proteger los bosques.

Innovaciones en gestión forestal
Los nuevos avances tecnológicos han abierto una puerta para impactar de maneras diferentes en la gestión forestal. Inteligencia artificial, big data, la nube o el blockchain son ya parte de diferentes actividades que están transformando el sector.
El escáner láser LIDAR
Esta tecnología permite realizar mediciones precisas de la topografía y la densidad forestal a través de pulsos de luz láser, optimizando así la gestión de los recursos.
¿Cómo funciona exactamente? Los impulsos viajan a la velocidad de la luz, rebotan en los objetos circundantes y vuelven al sensor LIDAR. El sensor mide el tiempo que tarda en volver cada pulso y calcula la distancia que ha recorrido. Dado que la velocidad de la luz es constante, este “tiempo de vuelo” puede utilizarse para calcular distancias precisas. Al repetir el proceso y enviar pulsos láser a un área mayor, se pueden recoger mediciones del tiempo de vuelo de miles de millones de puntos individuales y procesarlos en tiempo real en los que se conoce como nube de puntos LIDAR.
Los datos abiertos publicados por las administraciones públicas sobre la cartografía del terreno o la localización de los recursos hídricos son fundamentales para enriquecer los datos capturados mediante estas técnicas. Además, existen otros proyectos para agregar datos en formato LIDAR de todo el mundo como Open Topography y Lidar on-line, aunque su cobertura es aún limitada.
Monitoreo satelital
Cuanto mayor es la extensión del terreno, más difícil es tener controlado todo lo que sucede en él. En este contexto, los satélites se han convertido en grandes aliados para las empresas y agentes encargados de la gestión de bosques. Estos ofrecen de una manera rápida y precisa, imágenes en alta resolución.
Recientemente, la Agencia Espacial Europea lanzó al espacio el Biomass, un satélite que proporcionará información y datos sin precedentes sobre los bosques.
Tecnologías de este tipo aportan un gran valor en la detección temprana de incendios forestales. Para detectar áreas vulnerables a la deforestación o seguimiento de la regeneración forestal, se utilizan algoritmos de inteligencia artificial que ayudan a priorizar la protección de zonas más críticas.
Lo mejor de esta tecnología es que parece estar al comienzo de todo lo que puede ofrecer para la conservación de los bosques. A medida que se diseñan iniciativas globales para combatir el cambio climático, el uso de estas tecnologías en gestión forestal se perfila como un componente esencial.
Sensores y tecnología IoT
Los IoT, por sus siglas en inglés Internet of Things, son una serie de dispositivos físicos que reciben y transfieren datos a través de redes inalámbricas. Estos dispositivos pueden ser de gran ayuda para identificar los peligros que amenazan a los ecosistemas forestales, incluso a las personas.
Por ejemplo, en el contexto de prevención de incendios forestales, estos dispositivos pueden incluir sensores ambientales, cámaras térmicas y drones equipados con tecnología avanzada que monitorean las condiciones del terreno para detectar señales de algún incendio o condiciones propicias para su inicio.
Otra aplicación es la medición de humedad a través de sensores instalados en el suelo, los cuales permiten monitorear el porcentaje en tiempo real, lo que ayuda a detectar cambios que pueden indicar sequías o excesos de agua.
Uso de blockchain
Esta tecnología puede ser muy útil para medir el grado de sostenibilidad de una actividad concreta. Por ejemplo, en el sector de la madera, el blockchain puede conocer la trazabilidad de este recurso aportando datos sobre la huella de carbono, certificación forestal y características técnicas.
En Galicia, la Consejería de Medio Rural de la Xunta, en colaboración con la Agencia para la Modernización de Galicia, ha desarrollado FORTRA, una herramienta gratuita que es capaz de trazar la madera desde el origen del monte hasta su aplicación final. Proporciona datos en detalle sobre la procedencia de los bosques con gestión forestal sostenible y certificación forestal, emisiones de carbono derivadas durante el proceso de transformación y distribución, sus características técnicas o las empresas implicadas en toda la cadena de suministro.
La medición tan exacta y la accesibilidad sencilla es atractiva para las empresas forestales, generando transparencia con los consumidores, no solo beneficiando a la economía local, sino también a la sostenibilidad.